VIVIR CON SENTIDO

¿Quién no ha perdido el sentido de la vida alguna vez? Ha pensado que es una locura y lo que hace no le llena, no le encuentra un por qué?.
Y es que, no nos enseñan a amar la vida, a valorar su contenido, el sentido de estar vivos y la grata experiencia del gozo de lo que somos en cada inspiración con todo lo que nos rodea. Una paradoja absurda de la que se puede salir, encontrando un significado profundo a esto de vivir, algo que está en cada uno de nosotros y la decisión propia de cómo nos queremos vivir más allá de las circunstancias que nos rodean.

Yo, como tú, me he encontrado muchas veces en esa encrucijada, corriendo detrás de conseguir las cosas, que supuestamente, llenan los vacíos inmensos que se sienten cuando los días caen uno detrás de otro, y como un autómata, haces cosas y mas cosas, para rellenar los huecos carentes de lo esencial: el verdadero significado de para qué haces todo aquello.  

Nacemos programados para ser seres productivos, para ser los hombres y mujeres de éxito que espera la familia y la sociedad, lanzándonos al mundo sin las herramientas realmente necesarias para vivir una vida plena; y no para sobrevivir, como hacemos cuando no existe la consciencia de abrir los ojos a lo realmente importante que es vivir con sentido. 

Es en el camino de las insatisfacciones, de acomodarse a la mediocridad de “ni tan mal, hay otros peor”, donde se produce el estado anestesiado y la desconexión con el deseo interno; anestesia necesaria para que deje de doler el sueño apasionante de estar vivo.

¿Qué hacer si te encuentras en ese paradigma de sin sentido?

Lo primero es parar “stop” para reflexionar. Es necesario que te pares a dar forma a ese puzle sin hacer, que tienes entre las manos. Saber que eres un ser emocional, y por tanto todo lo que venga de las cosas que te emocionan, que te gustan, es lo que te ayuda a ponerte en movimiento para identificar cuál es el camino que te conduce a la aventura más emocionante que es la de conocerte a ti mismo. 

Tú en el espacio y tiempo que sucede en este mismo momento, dispuesto a enterarte de lo que pasa, mientras pasa… y ser parte vital del entramado de tu existencia. Ese camino desde donde empezar a darte cuenta de qué, quién o quiénes han tomado las decisiones por ti hasta ahora, y ya sabes que cuando tú no decides, son otros los que han o están eligiendo por ti. Como resultado, es posible, que estés viviendo sus vidas y no la tuya propia. ¿Quién lleva el rumbo de tu vida, ¿tu trabajo? ¿el dinero? ¿la pareja? ¿tus padres? ¿hijos? ¿el miedo al qué dirán? ¿el evitar sentirte culpable por hacer o no hacer algo que quieres?…con la finalidad de tomar el timón y empezar a dirigir tu vida.

Es muy importante que revises tu sistema de creencias. Aquello que crees es lo que creas, y además te comportas bajo su hipnosis. Son tan poderosas las creencias que anulan cualquier “sentido común”, se ama, odia, mata o se vive a través de ellas. Las creencias son las responsables de la percepción de lo que vives e interpretas todo el tiempo, y como resultado está tu manera de comportarte, la cual probablemente ya hayas “normalizado” y ni te percatas, sino más bien la justificas. Creencias siempre vas a tener, y ya que ves el mundo a través de ellas, lo interesante sería tener creencias que te apoyen, te potencien y faciliten tu crecimiento, ¿verdad? Tú tienes el poder de cambiarlas, y cuando lo hagas, vas a ver con tus propios ojos como los escenarios y personajes que se te presenta son “otros”. Es un trabajo de observación muy interesante cuando lo pones en marcha.

Pregúntate también, ¿dónde estás en este momento? ¿en qué mundo vives y si estás dispuesto a cambiarlo? ¿Dispuesto de verdad? La transformación requiere de un máximo de compromiso contigo mismo y responsabilidad, es un viaje para valientes con retos a superar, donde las perdidas están garantizadas y las ganancias son mayores según vas avanzando. Pierdes lo tóxico, las quejas, justificaciones, personas que no creen en ti, lugares que te hacen daño, ideas que te absorben, miedos irreales, pensamientos que te ponen la zancadilla y peso, … mucho peso que es un lastre para avanzar, y ganas libertad, conocimiento, sabiduría, confianza… ¿Estas dispuesto a realizar el cambio? 

Revisarte internamente por completo, es igualmente necesario para colocar y sanar heridas. En esta aventura de héroes, de heroínas, vas al encuentro de ti mismo, a encontrar tu propósito, que es el que realmente le da “sentido a tu vida”. Ese propósito es algo profundo que añoras, tu contrato sagrado para el que has nacido, lo más elevado donde te desarrollas y creces cómo persona para dar lo mejor de ti a los demás, a disposición del Universo o Dios, en lo que tu creas.

Esa pasión de amar a los que te rodean, lo que haces, de disfrutar cada día como el regalo preciado que es, ese valorar tu lugar en este mundo disfrutando de cada momento, sabiendo que eres tú el creador de tu realidad y que esta vida que vives es única, eso es lo que te da la fuerza para querer empezar cuanto antes. 

Cuando despiertas, aprecias lo que tienes, tomas la decisión más importante que es vivir despierto, comprometido con tu propósito, y eso produce un subidón de energía espectacular. Todo cambia, tu actitud cambia, te muestras emanando positividad y ganas, es bien importante esto para alcanzar y cumplir las metas que te propones; y es entonces, cuando se convierte en la Actitud de Fe: “La Disposición” y aparece la fórmula mágica de actitud + actitud = Altitud. Los estímulos que te llegan los captas con todos los sentidos, en consecuencia, se experimenta una gran confianza en uno mismo. La certeza de que todo se dará cuando sea el momento, ni antes, ni después…soltando la necesidad de controlar las horas, los resultados y el ego.

Vivir con sentido es agradecer cada día que despiertas, respiras y sentir entusiasmo (“soplo interior de Dios”), esa fuerza interna que te guía a ponerte en marcha y saltar de la cama sabiendo que estas construyendo un mundo mejor y mas bello. 


Vivir con sentido es expresar tu talento libremente, que es tu potencial y se pone de inmediato a disposición del propósito para recibir la abundancia que mereces. El talento es el regalo divino innato que te hace vivir coherente a lo que eres, al tiempo que realizas de manera armoniosa y fácil tu propósito para un bien mayor que es el de la evolución de toda la humanidad. Todos somos uno que trabajamos juntos, sólo hay que tomar consciencia de ello para domar los egos que luchan por apoderarse del mundo, limitando lo ilimitable.

Todo es cuestión de voluntad, de decir “si quiero” y la voluntad te abre las puertas para facilitarte el camino, se puede hacer cualquier cosa cuando estás en coherencia con tu ser.

Vivir Con Sentido es confiar “con fe”, y creer en uno mismo. Esto se adquiere con dosis de humildad y trabajo en uno mismo…desde aquí te invito a que des ese paso a lo desconocido, para que todo tome sentido y vivas la vida plena que te mereces.

Gracias Gracias Gracias 😊 Susana Espelleta

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *